viernes, 30 de abril de 2010

martes, 27 de abril de 2010

miércoles, 14 de abril de 2010



Texto argumentativo: La televisión.


La televisión mas llamada "tele" es un electrodoméstico que en menos de cincuenta años ha invadido el mundo entero. Ahora la tele se puede ver en el salón, en la cocina e incluso en habitaciones, en esta se pueden publicar anuncios, series, películas, programas... pero sobre todo en color cosa que antes no era así, se veía en blanco y negro. Sobre todo la tele produce imágenes en movimiento pero tiene algunos incovenientes:
Cuándo se abusa de ella provoca lesiones en la vista, tanto como en el cerebro y otro también es la distorsión de las noticias es decir, que nos quieren hacer creer cosas que no son verdad, pero también tiene ventajas:
Podemos disfrutar de ella con la familia viendo una película, también nos enseña y aprendemos cultura de otros países sobre todo cosas de países muy lejanos que no hemos visto o no hemos visitado y también tu serie preferida.
Pero mi conclusión sobre la tele es que sólo sirve para pasar un buen rato, pero en la vida hay cosas mas divertidas.

domingo, 11 de abril de 2010

La casa del señor Clin


El señor Clin era un gran vidriero que vivía en un pueblo pequeño y tranquilo.En la parte posterior de su casa tenia su taller y huerto con rosales, lechugas, repollos... Moldeaba hermosas figuras y frascos para envasar perfumes. Calentaba la pasta de vidrio, la mantenía durante un instante en el extremo de una caña agujereada, y cuándo soplaba a través de ella se producía el milagro: una sirena de mar, un ciervo, un pájaro.El señor Clin vivía sólo y era un hombre muy despistado y desmemoriado, nunca recordaba dónde dejaba las cosas. Así que decidió hacer un armario, una cómoda y una nevera de cristal. Ya sabía dónde estaba todo y decidió a la mañana siguiente hacer los grifos, el sofá y las cañerías de cristal.¡Y toda su casa de cristal! Cuándo Clin se duchaba la gente lo veían y lo tachaban de viejo loco y la gente no pasaba por su lado para no saludarle. Así que le entra el bicharraco de la pena, y empezó a llorar, todo su cuerpo se convirtió de cristal y tenía miedo de caerse, un día se cayó y los trocitos de cuerpo corrían entre las piedras y tintineaban en las piedras cantando su nombre:¡Clin!, ¡Clin!, ¡Clin!. Como una sonrisa ¡Clin!, ¡Clin!, como un juguete nuevo ¡Clin!, ¡Clin!, como un beso breve ¡Clin!, ¡Clin! Como un niño de zapatos de vidrio salió a la calle el viejo señor Clin.